Los envases SuperLift contienen muestras biológicas

Después de una operación, los órganos y tejidos extraídos son a menudo transportados al laboratorio desde el hospital para su análisis. El formaldehído es una sustancia peligrosa que forma parte del procedimiento, pero ahora es prescindible ya que el envase SuperLift hace este transporte especial fácil y seguro sin ella.

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La compañía italiana Kaltek srl lleva muchos años prestando servicio a los hospitals con una gama de soluciones profesionales y especializadas. Una de ellas era suministrar envases de RPC Superfos prellenados con formaldehído, un liquido altamente tóxico que preserva muestras biológicas. Estos envases se utilizaban para llevar tejidos y órganos postoperatorios al laboratorio.

El lado positivo del formaldehído es que mantiene los órganos y los tejidos intactos; esto es importante a la hora de transportar estas materias para su análisis médico. La parte negativa es que el formaldehído es letal incluso en cantidades muy pequeñas y extremadamente complejo de manejar.

Eliminar el uso de formaldehído
El propietario y CEO de Kaltek srl, el Dr. Lorenzo Cortelazzo, decidió tomar medidas para mejorar la salud y las condiciones del personal de hospital que trabaja con muestras biológicas postoperatorias. Explica:

“Nos habíamos fijado en las opciones que RPC Superfos ofrece a la industria alimentaria relativas a la larga conservabilidad y barreras al oxígeno, y de ahí hicimos la conexión a las muestras biológicas. La idea era tratar los órganos y los tejidos de la misma forma que los alimentos, extrayendo el oxígeno del envase e impidiendo su penetración, eliminando así el uso de formaldehído.”

Se realizaron una serie de pruebas en colaboración con un socio de la industria de equipos de llenado que fueron superadas con gran éxito.

Descargar, sellar y al laboratorio
La idea del Dr. Cortelazzo ha sido implementada recientemente: El resultado es un sistema totalmente nuevo que incluye una máquina que sólo puede ser operada por una persona. Después de la escisión, el órgano o tejido se introduce en el envase SuperLift y se crea un vacío. En cuestión de segundos el envase se cierra por termosellado de una película de barrera al oxígeno. Para este servicio especial de hospital el envase se utiliza en dos tamaños si bien con el mismo diámetro, lo que facilita la operación de la máquina de sellado.

El asa del envase facilita adicionalmente su manejo, y SuperLift cuenta además con un amplio espacio donde el personal del hospital puede introducir datos para identificar la muestra biológica.

“Las primeras reacciones que hemos recibido de los usuarios han sido muy positivas. Nuestro proyecto ha despertado un enorme interés y confiamos en estar en el buen camino”, afirma Dr. Lorenzo Cortelazzo, que subraya que ha sido un placer colaborar con RPC Superfos.