Una buena forma de evitar el desperdicio de comida

A veces se piensa que los envases de plástico solo tienen un impacto negativo en el medio ambiente. Sin embargo, estos envases protegen los productos alimenticios y evitan su desperdicio. Sin los envases de plástico, una mayor cantidad de comida producida de forma más costosa acabaría en el vertedero.

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¿Sabía que un tercio de los alimentos para el consumo humano que se producen cada año en el mundo se pierde o desperdicia? Además, la producción anual de la comida que no se consume implica el uso de 250 000 millones de m3 de agua, ocupa el 30 % de la superficie agrícola de todo el mundo y emite 3300 millones de toneladas de gases que alteran el clima (fuente: FAO).

En este sentido el envase de plástico desempeña un papel muy importante al proteger los alimentos y evitar su desperdicio. Asimismo, los envases de plástico poseen una serie de características muy valiosas si observamos toda la cadena de valor alimentaria desde el productor hasta el consumidor.

Mantengamos el plástico alejado de los océanos pero dejémoslo en los supermercados
Janni Langkjær Pedersen, responsable de comunicación de sostenibilidad en RPC Superfos, afirma:

«Debemos mantener el plástico alejado de nuestro entorno natural y necesitamos reciclarlo mucho más de lo que lo hacemos ahora. Este hecho es indiscutible. Pero no por eso podemos menospreciar las características tan útiles que posee el plástico cuando hablamos de evitar el desperdicio de comida».

«Probablemente, el despilfarro de comida en la cadena alimentaria aumentaría drásticamente si renunciásemos a los envases de plástico porque todavía no tenemos a nuestro alcance alternativas mejores y más sostenibles. Si bien se deben evitar unos envasados excesivos, no podemos ignorar el hecho de que sencillamente los envases de plástico poseen características excepcionales en cuanto a la conservación prolongada de los alimentos y su protección frente a daños. Por eso debemos mantener los plásticos alejados de los océanos, pero es difícil prescindir de ellos en el supermercado», añade.

El plástico evita el desperdicio de comida
Los envases de plástico protegen productos cuya fabricación ha demandado mucho tiempo y recursos. El plástico es ligero, duradero y flexible. Estas propiedades son extremadamente valiosas cuando hay que transportar alimentos, manteniéndolos frescos e intactos al mismo tiempo. En los debates que tienen lugar hoy en día, a menudo se pasa por alto que el plástico es un elemento muy importante para proteger el medio ambiente, ya que evita el desperdicio de comida. Sin él, la logística sería una cuestión sumamente problemática.

Como Janni Langkjær Pedersen recuerda, se ha observado que los productos que se venden a granel contribuyen a un mayor despilfarro, en algunos casos un 20 % superior, en los establecimientos. Además, sin el envase de plástico adecuado, los bienes se perderían o dañarían en la cadena logística o la venta al por menor. Esto supondría un claro impacto negativo para el medio ambiente.

«Es fácil ver y entender cómo un envase que se ha desechado de forma imprudente perjudica a nuestras zonas rurales y vías marítimas. Pero no debemos olvidar que la comida desperdiciada también deja una huella con mucho impacto en nuestro entorno», apunta Janni Langkjær Pedersen.

El nuevo proyecto de RPC Superfos ayuda a evitar el desperdicio de comida en los hogares 
En una reciente encuesta realizada por el Instituto Tecnológico Danés se revela que el 14 % del desperdicio de comida que se desecha en los hogares daneses proviene de las sobras de comida. Cuando las sobras se recalientan, la gente suele utilizar el microondas; sin embargo, según los resultados de dicha encuesta, a muchos no les gusta recalentar las sobras porque un calentamiento irregular las hace menos sabrosas, por lo que la comida termina en la basura.

En un intento por cambiar este comportamiento, RPC Superfos ha contribuido al desarrollo de un nuevo recipiente de plástico multifuncional que garantiza una distribución más uniforme cuando se calienta la comida en el microondas. Este proyecto de desarrollo se ha llevado a cabo con Imerco, una cadena de tiendas danesa con productos de decoración y menaje para el hogar, y el Instituto Tecnológico Danés. El nuevo recipiente de plástico consigue que las sobras recalentadas sepan mejor, lo que ayuda a reducir el desperdicio de comida en el ámbito doméstico.

En resumen, la conexión entre los envases de plástico y sus capacidades para evitar el desperdicio de alimentos preciados es claramente muy importante para el desarrollo de nuestra economía circular. Si desea obtener más información sobre el plástico y el desperdicio de comida, consulte la hoja informativa del RPC Group.